viernes, 31 de enero de 2014

AMISTAD FIEL (David Wilkerson)

Si eres un seguidor de Jesús, si eres parte del linaje de sangre de Cristo, ¡Satanás tratará de traer a tu vida a alguien para destruir todo lo divino en ti!
En este momento, puedes estar pensando: “¡Espera un minuto! Yo no quiero empezar a dudar de mis amigos o de pronto sospechar de ellos”. Si son amigos de verdad, unidos a tu corazón en el Espíritu de Cristo, no tienes nada que temer al examinar tu relación con ellos. Debes mirar todas tus amistades, a la luz de las Escrituras.
Es fácil determinar si tus amistades cercanas son de Dios o si han sido plantados por el enemigo para destruirte. Basta con pensar en tu mejor amigo, y luego, responder a estas preguntas:
  • ¿Él (o ella) chismea, difama o habla mal de los demás?
  • ¿Argumenta sobre la Escritura, debate continuamente y nunca llega a la verdad?
  • ¿Llama a las personas piadosas, “fariseos”?
  • ¿Detectas en sus palabras, un espíritu de desobediencia, envidia o sospecha?
  • ¿Escupe palabras venenosas contra su cónyuge?
  • ¿Ha tenido éxito en plantar malos pensamientos en tu mente respecto a los demás?
  • ¿Has comenzado a unirte a él (o ella) en escupir amargura?
Si tu amigo se ajusta a esta descripción, y tú estás siendo alejado más y más de Jesús por esa amistad, entonces puedes estar seguro de que el diablo ha sembrado a esa persona en tu vida. ¡Tiene el espíritu de Acab y ha sido enviado para destruir la obra de Cristo en ti!
Por otro lado, un amigo verdadero, piadoso, siempre se pondrá del lado de la Palabra de Dios en cualquier asunto y no sólo de tu lado por el hecho de ser tu amigo. Tal amigo no te conducirá a la amargura del pecado. En cambio, te amará lo suficiente como para decirte la verdad.

“Fieles son las heridas del que ama; pero importunos los besos del que aborrece” (Proverbios 27:6).


(Puede que te resulte fuerte esta meditación pero es cierta. Notemos que en ninguna parte dice que hay que dejar de amar a aquellas personas que no son una buena influencia para nuestro diario vivir. Hay que amarlas, orar por ellas y convidarles el pan de vida, la palabra de Dios para que el Señor pueda obrar en sus vidas.
Lo que recalca la nota es sobre la AMISTAD y no hay nada de malo, todo lo contrario, en tener sabiduría y pedir a Dios sabiduría, para elegir nuestras amistades. Un gran abrazo y muchas bendiciones.)




jueves, 30 de enero de 2014

¿Cómo Puedes Perdonar? (Rick Warren)

“Todo esto es la obra de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el encargo de anunciar la reconciliación. Es decir que, en Cristo, Dios estaba reconciliando consigo mismo al mundo, sin tomar en cuenta los pecados de los hombres; y a nosotros nos encargó que diéramos a conocer este mensaje. Así que somos embajadores de Cristo, lo cual es como si Dios mismo les rogara a ustedes por medio de nosotros. Así pues, en el nombre de Cristo les rogamos que acepten el reconciliarse con Dios.” 2 Corintios 5:18-20 (DHH)

Hace  60 años, cinco misioneros americanos llegaron a la selva Amazónica del Ecuador para hacer una segunda visita a la tribu Huaorani, los antropólogos afirmaron que era la sociedad más viciosa y violenta que habitaba  la faz de la tierra. Tenían una cultura criminal y estudios demostraron que un 60% de la tribu murieron por homicidio.
Tan pronto como los misioneros bajaron del avión, fueron muertos atravesados por lanzas por los  miembros de la tribu. Los brutales asesinatos fueron noticia alrededor del mundo y fueron cubiertos por las revistas LifeTime Newsweek. Muchos periódicos informaron de la muerte de estos hombres, Nate Saint y Jim Eliot.
Dos años después Elisabeth y Valerie Eliot, esposa e hija de Jim Eliot y Rachel Saint hermana de Nate Saint se trasladaron a Huaorani  para demostrar amor y perdón, ministrando a quienes habían dado muerte a sus familiares. Posteriormente, Mincaye, el líder de la tribu y cinco hombres que habían participado  en el asesinato de los misioneros se convirtieron al cristianismo.
La clase de perdón que Elisabeth Eliot y Rachel Saint mostraron que no tiene ningún sentido hasta que tú has sido perdonado por Dios. Una vez  que hayas pasado por esa experiencia, ¿cómo perdonas?  Haces las cuatro cosas que estas mujeres hicieron:
  1. Renuncia al deseo de venganza. Romanos 12:19 dice, "nunca tomen venganza. Dejen que se encargue la justa ira de Dios" (NTV). Déjaselo a Dios. Él se encargará de todo, y Él hará un mejor trabajo mucho mejor del que tú podrías hacer.
  2. Responde al mal con el bien. ¿Cómo sabes cuándo has perdonado completamente alguien? En realidad podrías orar para que Dios bendiga a la persona que te lastimó. La Biblia dice. “Hagan bien a quienes los odian bendigan a quienes los maldicen, oren por quienes los maltratan.” Lucas 6:27b-28 (NIV)
  3. Repetir estos pasos tantas veces sea necesario.Pedro le preguntó a Jesús en Mateo 18:21, Señor, ¿cuántas veces deberé perdonar a mi hermano, si me hace algo malo? ¿Hasta siete?" Jesús respondió, "No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete" (DHH) A veces el perdón tiene que ser continuo.
  4. Rescata a otros con la buena noticia del perdón de Dios. La Biblia dice en 2 Corintios 5:18-20,“Todo esto es la obra de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dio el encargo de anunciar la reconciliación. Es decir que, en Cristo, Dios estaba reconciliando consigo mismo al mundo, sin tomar en cuenta los pecados de los hombres; y a nosotros nos encargó que diéramos a conocer este mensaje. Así que somos embajadores de Cristo, lo cual es como si Dios mismo les rogara a ustedes por medio de nosotros. Así pues, en el nombre de Cristo les rogamos que acepten el reconciliarse con Dios.”(DHH)
Reflexiona Sobre Esto
  • ¿Por qué crees que es tan difícil dejar ir la necesidad de vengarse o de “tener la última palabra”?
  • ¿Qué puedes hacer para mostrar perdón en tu vida?
  • ¿Quién en tu vida necesita escuchar el mensaje de Dios de paz  y salvación?


miércoles, 29 de enero de 2014

¡BIENVENIDO!"

Un hombre muere y es trasladado al cielo. Por supuesto que encuentra a San Pedro esperándole a la entrada y dice al hombre: 
-"Así es como funciona. Tu necesitas 100 puntos para poder entrar en el cielo. Tu me vas a decir todas las buenas obras que hiciste, y yo te asignaré una cierta cantidad de puntos por cada cosa, dependiendo de qué tan buena fue. Cuando acumules 100 puntos, entonces podrás entrar."
-"OK", dice el hombre. "Pues estuve casado con la misma mujer por unos 50 años y nunca la engañé…ni en mi corazón."
-"Magnífico", dice San Pedro. "Eso si que vale tres puntos".
-"¿Tres puntos?", pregunta el hombre. "Pues, también asistí a la iglesia toda mi vida y la sostuve con mis diezmos, ofrendas y servicio."
-"Maravilloso", dice San Pedro. "Eso por cierto que tiene un valor de un punto."
-"¡Un punto!", exclama el hombre. "Pues, ¿Qué te parece esto? Estuve trabajando entre los pobres de mi ciudad, dándoles de comer y ropa también."
-"Fantástico", dice San Pedro. "Otros dos puntos a favor de tu cuenta."
-"¡Dos puntos!", grita el hombre. Si sigo así será solamente por la gracia de Dios que podré yo entrar al cielo."
-"¡BIENVENIDO!", dijo San Pedro. 


martes, 28 de enero de 2014

Perdona Porque Tú has sido Perdonado (Rick Warren)

“Recuerden que el Señor los perdonó a ustedes, así que ustedes deben perdonar a otros.” Colosenses 3:13 (NTV)

La Biblia dice que hay tres razones que tienes para dejar ir tu pasado y las personas que te hicieron daño, y las razones no tienen nada que hacer con que si esa persona lo merece o no lo merece.
  1. Tienes que perdonar a quienes te lastimaron porque Dios te ha perdonado. Colosenses 3:13 dice, “Recuerden que el Señor los perdonó a ustedes, así que ustedes deben perdonar a otros.”(NTV). Si quieres ser una persona que perdona, primero necesitas aceptar el perdón de Dios por medio de Jesucristo. La Biblia dice que Dios vino al Mundo en forma humana en Jesús, para perdonar todo lo que has hecho mal. Él pagó por eso así que tú no lo tienes que pagar. Eso son buenas noticias.
  1. Tienes que perdonar a quienes te lastimaron porque el resentimiento te controla. La Biblia dice en Eclesiastés 7:9, “No te dejes llevar por el enojo que sólo abriga el corazón del necio.” (NVI). El resentimiento te hace miserable, y te hace estar atrapado en el pasado. Y cuando estás atrapado en el pasado, eres controlado por el pasado. Cada vez que resientes algo, eso te controla. Muchos de ustedes están permitiendo que personas que les hirieron, hace 5, 10 o incluso 20 años, les hieran hoy. Eso es estúpido. No dejes que eso suceda. Ellos no te pueden herir nunca más. Tu pasado es pasado. Tienes que dejarlo ir.
  1. Tienes que perdonar a quienes te lastimaron porque vas a necesitar más perdón en el futuro.Jesús dijo en Mateo 6, “Porque si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial. Pero si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre les perdonará a ustedes las suyas.” (NVI).  El perdón es una carretera de dos vías. No puedes recibir lo que no estás dispuesto a dar.
Alguien le dijo una vez a John Wesley, “¡Nunca podré perdonar a esa persona! Wesley respondió, “Espero que nunca peques.” No quemes el puente por donde tú mismo vas a caminar para ir al Cielo.

Reflexiona Sobre Esto
  • ¿En cuál situación necesitas ofrecer perdón para así poder salirte de tu pasado?
  • ¿Cuál es un pecado que crees que nunca podrías perdonar?
  • ¿Cómo crees que Dios se siente a causa de ese pecado?

lunes, 27 de enero de 2014

Dios nos da el arrepentimiento por que nos AMA.

“Y allí os acordaréis de vuestros caminos, y de todos vuestros hechos en que os contaminasteis; y os aborreceréis a vosotros mismos a causa de todos vuestros pecados que cometisteis.”  Eze_20:43.

Cuando somos aceptados por el Señor, y estamos colocados en el lugar de favor, y paz, y seguridad, entonces somos conducidos a arrepentirnos de todas nuestras fallas y extravíos para con nuestro Dios lleno de gracia. El arrepentimiento es tan precioso, que lo podemos llamar un diamante de hermosas aguas, y esto está dulcemente prometido al pueblo de Dios como uno de los resultados más santificantes de la salvación. Aquel que acepta el arrepentimiento, también da el arrepentimiento; y no lo da proveniente de “la caja amarga” sino que lo toma de entre “las hojuelas con miel” con las que alimenta a Su pueblo. Un sentido del perdón comprado con sangre y de la misericordia inmerecida, es el mejor medio para derretir a un corazón de piedra.
¿Tenemos duros sentimientos?  Pensemos en el amor del pacto, y entonces dejaremos el pecado, lamentaremos el pecado y odiaremos el pecado; sí, nos aborreceremos a nosotros mismos por pecar contra un amor tan infinito. Acerquémonos a Dios con esta promesa de penitencia, y pidámosle que nos ayude a recordar, y a arrepentirnos, y a lamentarnos, y a regresar.   ¡Oh, que pudiéramos gozar del derretimiento  provocado  por aflicción santa! ¡Qué alivio sería una inundación de lágrimas! ¡Señor, golpea la roca, o háblale a la roca, y haz que las aguas fluyan!

La Chequera del Banco de la Fe.
Charles H. Spurgeon
Traducción de Allan Román



sábado, 25 de enero de 2014

Gracia, libre de culpa (Por Max Lucado)

“No temas, pues no serás avergonzada; ni te sientas humillada, pues no serás agraviada; sino que te olvidarás de la vergüenza de tu juventud, y del oprobio de tu viudez no te acordarás más.” – Isaías 54:4

La Biblia nos dice que hay Libertad, que Cristo nos hizo libres (Gálatas 5:1). Si usted ha hecho a Jesús su Señor y Salvador, entonces no importa lo que hayas hecho en el pasado, o incluso en el presente, usted es libre de la condenación y la culpa que viene con el pecado…. No, porque tu eres justo, sino porque Jesús es justo !
Cuando Jesús murió en la cruz por nuestros pecados, la deuda fue pagada en su totalidad. Así que en lugar de centrarse en lo que has hecho, o en cómo ” has estropeado todo otra vez” recuerda que esas cosas no tienen condenación para ti por lo que Jesús hizo al pagar por nosotros. La próxima vez que usted se sienta culpable o avergonzado en algo que sucedió en el pasado, le animo a empezar a alabar a Jesús por lo que Él hizo para que pudiéramos ser libres de la condenación y la culpa.


jueves, 23 de enero de 2014

Ser agradecidos siempre

“Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús”1 Tesalonicenses 5.18
En la versión NVI: “Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús”.

En primer lugar debemos ser agradecidos en todo para con Dios, y también con aquellos que nos bendicen.
La palabra dice: en toda situación”, esto es, no solo por las situaciones positivas, sino también por las negativas.
Para esto es imprescindible creer verdaderamente que a los que a Dios aman, todas las cosas ayudan a bien.
También declarar de corazón, que Jehová es el que da y Jehová es el que quita y bendito es el nombre del Señor, en ambas situaciones.
  • Dar gracias a Dios por las pequeñas y grandes cosas.
  • Dar gracias a Dios por las cosas que hoy no comprendemos.
  • Dar gracias a Dios aun por las cosas que Él no nos ha dado.
Si hay amargura en tu corazón por algo que no has recibido, o que esperabas y no se te ha concedido, renunciá a este sentimiento y pedile al Señor que sane tu corazón.
Declarale a Dios que lo amás y que lo vas a servir, no por lo que Él te da, sino por lo que Él es para vos: tu Salvador y tu Señor. 

Yo bendigo tu vida para que puedas recibir con gozo la soberanía de Dios y puedas ser agradecido en toda situación, sujetándote a su voluntad para con vos. 

(Pastor Daniel González)


miércoles, 22 de enero de 2014

Apoyándose en las Promesas de Dios (Rick Warren)

“Pues el Señor, Dios del cielo, quien me sacó de la casa de mi padre y de mi tierra natal, prometió solemnemente dar esta tierra a mis descendientes.[a] Él enviará a su ángel delante de ti y se encargará de que encuentres allí una esposa para mi hijo.” Génesis 24:7 (NTV)
Muchas personas empiezan el año con una meta. Resuelven perder peso, estar más tiempo con sus hijos, leer más, tener logros específicos en el trabajo, o alguna otra meta noble (y a veces no tan noble).
Pero no todas las metas son metas piadosas. Las metas piadosas están sujetas a las promesas de Dios en su Palabra. Sus promesas nos dan el coraje y la fe para avanzar cuando es más natural estar preocupado y temeroso.
En Génesis 24, Abraham le dio a su sirviente, Eliazar, una meta difícil: Encontrar esposa para su hijo Isaac. Al principio Eliazar dejó que el miedo lo invadiera. Él le pregunto a Abraham: “¿Qué debo hacer si encuentro esposa para Isaac, pero ella no quiere venir conmigo?”
Abraham le recordó a su sirviente la promesa de Dios:“Pues el Señor, Dios del cielo, quien me sacó de la casa de mi padre y de mi tierra natal, prometió solemnemente dar esta tierra a mis descendientes. Él enviará a su ángel delante de ti y se encargará de que encuentres allí una esposa para mi hijo” Génesis 24:7 (NTV).
Después de que Abraham le recordó a Eliazar la promesa del Señor, sus temores se evaporaron. La misma cosa pasa con nosotros. Es temeroso poner todo lo que tienes en una meta grande. Nadie quiere fallar.
Pero la Biblia nos incita a no mirar nuestras propias fuerzas para cumplir nuestras metas. De hecho, si podemos cumplir nuestras metas en nuestras propias fuerzas, entonces no estamos estableciendo metas piadosas.
¿Qué es lo que dice la Palabra de Dios sobre tus metas para este año? Nunca lo sabrás a menos que conozcas lo que la Biblia enseña. Es como tener una póliza de seguro, pero no sabes cuál es su cobertura. Puede que te estés preocupando demasiado sin necesidad.
En la Biblia Dios promete ayudarnos a estar más saludables, ser mejores padres, eliminar nuestras deudas, y mucho más. Pero a menos que sepamos esas promesas y las reclamemos como nuestras, nos estaremos preocupando innecesariamente sobre esas metas.
La verdad es, no tienes que tener una gran fe para cumplir las grandes metas. Solo necesitas un poco de fe – ¡en un gran Dios! Tu Dios es el Dios del universo. Él puede hacer lo que sea.
¿Estás listo para confiar en Dios más allá de lo increíble?

Reflexiona sobre esto
  • Cuando otras personas rompen sus promesas. ¿Cómo impacta eso nuestra habilidad de confiar en Dios?
  • ¿Cuál promesa de la Palabra de Dios necesitas apropiarte para tus metas en 2014?
     
  • Apropiándote de las promesas que Dios te ha dado. ¿Cómo llena eso tu necesidad de confianza para perseguir tus metas?

martes, 21 de enero de 2014

Salmos 32 (NVI)

1 Dichoso aquel
    a quien se le perdonan sus transgresiones,
    a quien se le borran sus pecados.
2 Dichoso aquel
    a quien el Señor no toma en cuenta su maldad
    y en cuyo espíritu no hay engaño.
3 Mientras guardé silencio,
    mis huesos se fueron consumiendo
    por mi gemir de todo el día.
4 Mi fuerza se fue debilitando
    como al calor del verano,
porque día y noche
    tu mano pesaba sobre mí.     Selah
5 Pero te confesé mi pecado,
    y no te oculté mi maldad.
Me dije: «Voy a confesar mis transgresiones al Señor»,
    y tú perdonaste mi maldad y mi pecado.     Selah
6 Por eso los fieles te invocan
    en momentos de angustia;
caudalosas aguas podrán desbordarse,
    pero a ellos no los alcanzarán.
7 Tú eres mi refugio;
    tú me protegerás del peligro
    y me rodearás con cánticos de liberación.     Selah
8 El Señor dice:
«Yo te instruiré,
    yo te mostraré el camino que debes seguir;
    yo te daré consejos y velaré por ti.
9 No seas como el mulo o el caballo,
    que no tienen discernimiento,
y cuyo brío hay que domar con brida y freno,
    para acercarlos a ti.»
10 Muchas son las calamidades de los malvados,
    pero el gran amor del Señor
    envuelve a los que en él confían.
11 ¡Alégrense, ustedes los justos;
    regocíjense en el Señor!
¡canten todos ustedes,
    los rectos de corazón!


(Selah: "pausar y pensar en eso")


viernes, 17 de enero de 2014

¿Qué tanto Amas? (Rick Warren)

“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.” El segundo es: “Ama a tu prójimo como a ti mismo.” No hay otro mandamiento más importante que éstos.” Marcos 12:30-31 (NVI)
Ayer hablamos sobre el primero de los cinco factores que influyen en tu identidad. Todos hemos sido hechos maravillosamente complejos y llenos de defectos, pero hasta que nos aceptamos como somos — incluyendo nuestros defectos — no podemos hacer los cambios en nuestras vidas que traerán consigo la verdadera transformación.
El segundo factor que influye en tu identidad son tus conexiones. Tus conexiones te dan tu identidad, significado y propósito en la vida. Si creciste con relaciones disfuncionales, entonces cuestionas tu propósito y luchas con tu identidad. 
Jesús dijo que lo más importante que debemos hacer es amar a Dios y amar a otras personas (Marcos 12:30-31). La vida no es acerca de tus logros o adquisiciones, tu popularidad o prestigio. Es acerca de cómo amas.
Hay tres problemas que te alejan de amar de acuerdo a la intención de Dios:
  1. Todos somos imperfectos. No hay ninguna relación perfecta porque no hay  personas perfectas. 
  1. El pecado nos desconecta. Adán y Eva tuvieron la primera relación rota, se desconectaron de Dios y del uno al otro. Nosotros mismos nos hemos estado disculpando y acusando a las personas que amamos desde entonces. 
  1. Entre más desconectados estamos, más temerosos nos volvemos. Anhelamos la intimidad, pero tememos la vulnerabilidad. Anhelamos la aceptación, pero tememos el rechazo. 
Puedes no haber tenido nada que ver con las cartas que te tocaron en vida. Pero Dios envió a Su hijo como tu Salvador para transformar tus cartas en una mano ganadora. No importa qué conexiones has hecho en la vida, serás responsable de lo que hagas con tus conexiones.
¿Dejarás que Dios afecte tus conexiones? ¿Le confiarás tu futuro a pesar de un pasado difícil? ¿Quieres nutrir, proteger y construir relaciones para que Dios sea glorificado en tu vida? 
Hoy decide construir relaciones sanas y no dolorosas con la ayuda de Dios. 
Reflexiona Sobre Esto
  • ¿En qué relaciones necesitas invertir más tiempo o más del amor de Cristo? 
  • ¿Cómo logras "amar a tu prójimo como a ti mismo"?
  • ¿Qué haces con tus parientes difíciles, compañeros de trabajo, o una relación rota?


miércoles, 15 de enero de 2014

Incluso tus Defectos pueden Glorificar a Dios (Rick Warren)

“¡Gracias por hacerme tan maravillosamente complejo! Tu fino trabajo es maravilloso, lo sé muy bien.” Salmos 139:14 (NTV)
Cuando la gente está sufriendo, necesita la verdad simple, no simplista. No basta decirle a alguien que ore, que lea la Biblia o que vaya a la iglesia. Tienes que ayudarlos  a saber cómo hacer los cambios en sus vidas. 
Y no podemos hacer cambios en nuestras vidas hasta que comprendemos nuestra identidad. No puedes convertirte para lo que Dios te creó, hasta que abraces tu identidad — el único sin lugar a dudas y defectuoso tú, que Dios hizo con un propósito.
Eres maravillosamente complejo (Salmo 139). Para cumplir con el propósito de Dios para ti, tienes que ver todas las dimensiones de tu vida y comprender cinco factores que influyen en tu identidad. Luego, tienes que aprovechar al máximo lo que te han dado. Todos podemos tener diferentes padres, dolores, problemas y potencial, pero todos tendremos que dar cuentas un día, por lo que hicimos con esos factores.
Es como una partida de póker: no puedes mezclar tus cartas. No puedes elegir tus cartas. Tienes que jugar con las cartas que te tocan. 
El primer factor que te hace ser tú, es tu química. Este es tu ADN, tus genes, tus hormonas, tu composición química. Algunos de ustedes nacieron con hipersensibilidad; otros tienen una muy alta tolerancia al dolor. Algunos de ustedes tienen un nivel bajo de energía; otros están rebotando contra las paredes. Algunos de ustedes tienen espaldas propensas a fallarte, vista débil o huesos frágiles. Algunos de ustedes tienen bajos niveles de oxitocina, una hormona que afecta cómo nos relacionamos con otras personas. 
No es pecaminoso ni vergonzoso — ¡es la manera en que Dios te ha conectado! Compré un par de jeans desgastados y tenían una etiqueta que decía: "estos jeans tienen defectos intencionales para hacerlos únicos". Los "genes" son de la misma forma: tienen defectos que te hacen único. Esas fallas son parte de tu diseño personalizado, y Dios lo planeó para Su propósito y gloria.
Nunca serás capaz de hacer un cambio en tu vida o cumplir con el propósito de Dios para tu vida, hasta que comprendas que eres maravillosamente complejo y únicamente erróneo para la gloria de Dios. Entonces, la pregunta es: ¿Qué harás con las cartas que te fueron dadas? 
Reflexiona Sobre Esto
  • ¿Cuáles son los defectos que te hacen único?
  • ¿Cómo puedes usar esos defectos para traer la gloria de Dios?


lunes, 13 de enero de 2014

¿Alguna vez has estado a solas con Dios?

"Cuando quedó sólo, los que estaban cerca de él con los doce le preguntaron sobre la parábola",
Marcos 4:10

Él a solas con nosotros. Cuando Dios nos lleva a estar a solas por medio del sufrimiento, la aflicción, o la tentación, por la desilusión y la enfermedad, o por los deseos frustrados, por una amistad rota o una nueva amistad; cuando permite que nos encontremos completamente solos y enmudecidos, incapaces de hacer siquiera una pregunta, entonces Él empieza a enseñarnos. Observemos el entrenamiento de Jesucristo para los doce. Eran los discípulos, no la muchedumbre, quienes estaban confundidos. Constantemente le estaban haciendo preguntas y Él siempre les explicaba las cosas; pero no las entendieron hasta que recibieron al Espíritu Santo (ver Juan 14:26).

Mientras caminas con Dios, lo único que Él quiere que sea claro para ti es la forma en que trata con tu alma. Las penas y dificultades en la vida de otras personas te resultarán totalmente confusas. Dejamos de creer que entendemos la lucha del otro sólo cuando Dios pone al descubierto los mismos defectos en nuestra vida. Existen vastas áreas de terquedad e ignorancia que el Espíritu Santo tiene que revelar en cada uno de nosotros, pero esto ocurre únicamente cuando Jesús nos lleva a estar solos. ¿Estamos ahora a solas con Él, o nos preocupan más nuestras propias ideas, amistades y los cuidados de nuestro cuerpo? Jesús sólo puede enseñarnos algo cuando acallamos todas nuestras preguntas intelectuales y nos encontramos a solas con ÉL.